Ni aunque tenga mi peso en lana encima cambiaré mi actitud veraniega por una más invernal.
Me resisto.
No me obligarán a caminar escondida bajo algún paraguas común, el mío será un quitasol.
No me dedicaré a chanchear porque es normal que la gente engorde en invierno, chanchearé porque se me antoja, sea helado o sopaipilla.
No seré otro ente negro de esos que pasean por las calles escondiéndo su color/calor interno detrás de un opaco abrigo, mantengo mi tradicional abrigo de caperucita roja, incluyendo cinta roja.
Escucharé y bailaré con Camera Obscura cuantas veces sea necesario, e incluso aunque no lo sea, sólo porque de oirlos se me antoja una tarde echada en el pasto con el sol en la cara.
No tendré esa cara mitad frío - mitad stress, haré hasta las mas impresionantes muecas si de evitarlo se trata.
El resfrío tampoco será un impedimento, ya tengo listo mi cóctel trioval-tapsin caliente en caso de emergencia.
Todos los días seran buenos días, llueva, truene o relampaguee...
porque para mi, el sol brilla...como si fuese verano.
Buenos días a quien lo lea también.
3 comentarios:
Buenos días Maquita, linda declaración de principios.
Uh, hablas como si el invierno fuera todo feo. A mi, en lo personal, me encanta. Me hacen feliz el frío y los días nublados, y mejor si llueve; el calor me sofoca. Actitud invernal no significa actitud negativa... al menos no en mi caso, soy de lo más feliz por estos meses, me encantan. :)
Cosa de gustos, supongo...
Saludos Macoreno, qué lindo que tu verano que tanto te gusta te acompañe todo el año. :P
A Álvaro le gusta esto.
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