Y si te dijera que...

Me reconozco algo loca, lo sé. Cambiante, temperamental, gruñoña, indecisa, peleadora, sensible, irresponsable a veces, avara, con vicios y adicciones varias, parrandera, despreocupada...pero no mentirosa.
La gente muere. La gente se va. Y no vuelven nunca más. Por más que tuvieras planes para el otro día, las cosas se acaban y se acaban nomás.
Eso de cierta forma lo aprendes a menor escala cuando chico (o a veces cuando grande), cuando tu mascota se muere, cuando te cambias de casa y aquel amigo de toda tu infancia ahora vive al otro extremo de la ciudad, cuando tienes que entrar al colegio el primer día de clases y dejar a tus papas en la puerta, por más que llores, así es la vida y más te vale aprenderlo pronto, porque finalmente nunca estás preparado, pero sí asumirlo se hace más fácil.
A veces la mentira puede parecer más dulce, más light, nos ahorramos la parte de las lágrimas y el sufrimiento y asumimos una falsa realidad...¿pero de qué sirve?
Cuando sabes la verdad el dolor de multiplica por mil, y la culpa no es de quien te haya contado como son realmente las cosas, finalmente el culpable es quien te contó esa mentira bilz y pap, lo más probable es que te enojes con el mentiroso.
Mentiroso mentiroso.
Podré ser una oveja negra, el punto negativo, la deshonra de la familia, pero mentirosa no (irrespetuosa tampoco) y menos le enseñaré a los otros a mentir, porque es el peor daño que puedes hacer.
Preferiria asumir que han regalado un cachorrito, que tiene una buena familia quienes lo cuidaran y alimentaran, que quedarme pensando toda la tarde si tendrá comida o si estará pasando hambre, para poner un ejemplo que en la práctica podría ser verdad.
Pero bueno, quien soy yo para hablar de lo que es más correcto, no? si soy una ebria hiperventilada floja contestadora y tal vez hasta drogadicta.
Igual hablo, me enseñaron así.
Porque cuando sientes que estas haciendo lo correcto, aunque duela, hay que hacerlo. Porque los resultados de una mentira son generalmente negativos. Porque si no te enseño a ti a decir la verdad, tu después podrías mentirme. Porque te enseño. Y ni siquiera vivo contigo pero quiero que aprendas a hacer la correcto. Que no termines siendo ebrio, hiperventilado, flojo o contestador y tal vez drogadicto, para que no tengas justificación para actuar mal, para enseñarte a ti así como yo se que tu alguna vez le enseñaras a alguien más.
Pero de qué hablo no? Una mentira es sólo una mentira.
Bueno, creo que acabamos de comprobar que es más que eso.

Hola tu, si tu, quien lee mi blog para saber como estoy o quien soy en vez de preguntar, hola. Si este mensaje te llega entonces de verdad eres tu, primero te saludo y te digo que no saques conclusiones a través de estos escritos, para eso me llamas por teléfono o nos tomamos un café y te cuento de mi vida, eso si seria una conversación sin prejuicios. Ahora, esto es solo mi impresión, no se si será la más adecuada o la vía más fácil, pero la locura me ha enseñado que finalmente es lo mejor. Sea la mala persona que sea, nunca olvido que es lo mejor. Saludos.

Y saludos al resto, es uno de mis escritos más directos asi que si les tienta opinar, hagánlo.